Comunidad

Escuelas del régimen Costa se fusionan para el inicio de clases esta semana

Dos y hasta tres planteles funcionarán en un solo establecimiento. Es el plan de contingencia del Ministerio de Educación para las 151 instituciones que pasan por proyectos de mejora de su infraestructura. El traslado será temporal.

Diferentes puertas para el ingreso y la salida, recreos a distintas horas, aulas y baños separados… Esta es parte de la estrategia que planean las instituciones educativas que acogerán a los estudiantes de otros 151 planteles fiscales que pasarán por trabajos de mejora en el arranque del año escolar en la Costa.

En conjunto, los directivos han llegado a acuerdos para diseñar los horarios, adaptar momentáneamente auditorios y laboratorios como salones de clases, y buscar espacios temporales para las oficinas administrativas.
Desde este viernes, cuando comenzará el nuevo periodo escolar, los 1 230 estudiantes de la Unidad Educativa Alfredo Baquerizo Moreno regresarán de forma progresiva a sus aulas, después de dos años de ausencia por la pandemia.

Pero no serán los únicos. A ellos se sumarán los 710 chicos de la Escuela Matilde Márquez de La Plata, también ubicada en el Suburbio de Guayaquil y que estará cerrada mientras remodelan y arreglan el patio, la fachada de la institución y las instalaciones eléctricas.

Johnny Lucero es el rector del plantel que los acogerá y asegura que el plan para recibirlos está listo. “Los niños de inicial y básica elemental, de ambos planteles, serán atendidos de lunes a viernes; también los chicos de bachillerato. Solo la básica media -de cuarto a séptimo año- acudirá tres veces por semana y los dos días restantes tendrá acompañamiento en casa”.

Wilmer Sánchez, el director de la escuela en reparación, lleva semanas planificando el traslado con docentes y padres. Algunos ya han recorrido las instalaciones transitorias y se han unido a las mingas para arreglar las bancas, pintar las paredes y limpiar los patios. “La obra en nuestro plantel finalizará entre julio y agosto. Regresaremos en cuanto culmine”.

Fuente: El Comercio